Este es otro de los deportes de aventura que día a día cuenta con más adeptos en todo el mundo. Considerado de alto riesgo, utiliza la fortaleza física de brazos y piernas, a la vez que combina la destreza técnica del escalador.
A los principiantes le recomendamos no iniciar ascensiones en paredes naturales, sino en artificiales y bajo el asesoramiento de un guía profesional que, por módicos precios, ofrecen toda la información teórica y práctica para incursionar en esta apasionante actividad.
Por motivos de seguridad es preferible que cada ascensión no se realice individualmente, es mejor moverse en grupo, sobre todo para poder compartir la experiencia.
Es imprescindible la utilización de la indumentaria adecuada para efectuar esta especialidad. Básicamente consiste en un arnés de cintura, mosquetones de seguridad y “pies de gato’” que es el calzado específico, muy flexible y con suela de goma cocida de gran adherencia, además de la resina de magnesio que evita que las manos suden y pierdan agarre.
Antes de partir se debe examinar el terreno por el que se va a pasar y si las condiciones meteorológicas fueran adversas es mejor cancelar todo, pués se puede sufrir alguna caída o resbalón.